Patmos fue durante siglos, hasta hace poco, una, pequeña, remota isla rocosa conocida sólo como el lugar en el Apocalipsis de San Juan fue escrito. Un lugar sagrado, olvidado en su privación. Hoy Patmos es un destino cosmopolita con clase, de renombre en todo el mundo. Su pueblo medieval de Chora es considerado como uno de los asentamientos tradicionales más bellos y en circulación en la región mediterránea. Un patrimonio arquitectónico mundial. La recopilación de la arquitectura tradicional Patmian de Chora con el monasterio fortificado bizantino imponente, que corona el asentamiento, crea una de las imágenes asentadas más famosos e impresionantes.

Esta belleza atrajo a Patmos numerosos visitantes de todo el mundo. Y ellos, a su vez, descubrieron la otra gran característica de la isla: su paisaje escénico. Patmos tiene playas de una belleza rara y exótica. Esta belleza ha creado un flujo turístico alternativo a la isla; la de los amantes de sus encantos recreativas.

Hoy Patmos es un destino superior, aclamado por tanto su tradicional-cultural y su atractivo natural. Patmos es una revelación de la belleza.